Hay que jugar posición adelantada

Hay que jugar posición adelantada




Estamos enfrentando uno de los mayores retos como sociedad, la declaración de pandemia y la posterior paralización de la economía han tenido tremendos impactos económicos, sociales y políticos. Frente a esta inmensa y lamentable complejidad, existe una paradoja que es notoria al apreciar como cada día se renueva el espíritu emprendedor de cientos de empresarios, gerentes y profesionales que, aun cuando las condiciones no estén definidas, no esperan más y se han activado con entusiasmo para poder recuperar sus negocios y contribuir con la reactivación económica.

Estoy convencido que hay que jugar posición adelantada, actuando de manera responsable y decidida, impulsando nuestras actividades económicas, enfrentando el gran desafío de no dejar a nadie atrás y profundizando en el propósito personal y empresarial que permita trasformar la realidad actual en oportunidades de desarrollo y bienestar para todos.

Cuando sugiero jugar posición adelantada, me refiero a construir un proceso fluido que refuerce la confianza a través de cinco focos claves:

Hoy todos hemos experimentado nuevas realidades personales y profesionales que hace pocos meses parecían impensables, poniendo de manifiesto la relevancia de contar con líderes auténticos, pero sobre todo la necesidad de prepararnos ante los posibles imprevistos y situaciones de crisis que garanticen la resiliencia de las organizaciones.

En este contexto considero oportuno resaltar las palabras de Albert Einstein, contenidas en su reflexión sobre la crisis:  “No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progreso. La creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis, se supera a si mismo sin quedar superado. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en las crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla”.

Hay que jugar posición adelantada

Hay que jugar posición adelantada

Leer esta vieja reflexión de Einstein, el científico más importante del siglo XX, es un excelente contexto para el momento actual que debe impulsarnos a esforzarnos al máximo para lograr que esta situación muestre lo mejor de las personas para convertir esta crisis en progreso.

Es claro que nos ha tocado gestionar los negocios con un alto nivel de incertidumbre, seguiremos aprendiendo que, para ir hacia adelante, a veces hay que retroceder y lograr enfocar mejor nuestro esfuerzo.

Justo ahora es el momento de impulsar el desarrollo inclusivo, crear nuevas alianzas para fortalecernos, reforzar los valores y propósito empresarial, ser más cercanos, promover el cambio como catalizador para lograr un mundo mejor y fortalecer nuestra continuidad de negocio. El momento es justo ahora, y hay que jugar posición adelantada!