De viajero a estratega con China

De viajero a estratega con China




Incursionar en el mercado asiático y buscar proveedores puede resultar una pesadilla, a menos que aparezca un ‘traductor’ de negocios, justo el emprendimiento que realiza Germán Nuñez, el chiricano de AllChina que guía a los latinos.

Perderse en China es fácil y más cuando se trata de hacer negocios. La gran brecha existente entre las culturas empresariales y comerciales de Asia y Occidente, muestra dos mundos opuestos donde las negocios laten a un ritmo diferente.

“Muchos empresarios occidentales llegan a China pensando en que deben negociar un buen precio, pero se desenfocan al ver tanta oferta y opciones, y comenten muchos errores”, comenta Germán Núñez, CEO y fundador de AllChina, una agencia de asesoría para empresas Latinas en busca de fijar relaciones comerciales con el gigante asiático.

Núñez es chiricano y tiene 36 años de edad. En 2006 vivía en Tenerífe, España, cuando tomó unas vacaciones en un destino exótico para la época: China. Lo hechizaron su cultura pero en especial su magia, al punto de que pensó de que se trataba de un camino fácil.

“No caí en la cuenta en el problema en que me metía, hasta que perdí el pasaje de regreso y me quedé sin dinero y sin visa de turista. Tomé una decisión bajo presión: hacer algo para aprender mandarín. La solución: enseñar inglés a un grupo de niños y ellos a su vez me enseñarían su idioma”. Núñez consideró aprovechar la oportunidad de vivir en China para iniciar un negocio propio.

De viajero a estratega con China

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“Estar en la meca mundial del comercio y además en Cantón, me hizo pensar en AllChina para conectar a los latinoamericanos con China”. Núñez pasó por el inciertto trámite de cambiar su visa de turista por una de trabajo como profesor de inglés en su primer año de vivir en Guangzhou, capital de Canton. “A la vez que enseñaba inglés, construí AllChina con todas las normas locales, que no son pocas”.

Encontró la motivación en la feria de Cantón, que se realiza desde 1957, para entender qué había un problema y una solución para los interesados en hacer negocios. “Todo surge de una necesidad. Cuando fui la primera vez a la feria vi que los latinoamericanos no sabían hacer negocios adecuadamente, en medio de muchas preguntas: ¿Tenían la dificultad de qué hacer con el dinero? ¿Cómo no perder esa inversión? ¿A quién comprarle, o si llega un contenedor equivocado?” Entonces apostó a China en momentos en que poco se sabía de sus avances y “la gente tenía en mente que había productos de baja calidad”. China para todos AllChina se integra de un equipo multidisciplinario y un crisol de varias nacionalidades latinoamericanas y nacidos en China.

“Hemos conformado un equipo que asiste al empresario en todo el proceso de negociación, desde preparar cotizaciones con proveedores reales. Cuando se desconoce el terreno de los negocios en China, muchos terminan haciendo acuerdos con intermediarios que encarecen la cadena productiva. Hacemos además investigación y asesoría de mercado para conocer al proveedor y verificar que es una empresa confiable”.

De viajero a estratega con China

De viajero a estratega con China

De la asesoría, la empresa pasó a tener bodegas en los principales puertos chinos, para analizar la calidad de los productos embarcados. Y tiene una agencia de mercadeo. “Desde 2006 hemos asesorado a clientes de muchos países de latinoamérica”.

El latinoamericano promedio acude al mercado chino a comprar productos textiles, calzado o tecnología. “Tratamos de asesorarlos para adquirir además productos especializados y tecnología y maquinaria, para lograr transferir ese conocimiento y hacer la transformación de importadores a fabricantes y ensambladores en Latinoamérica con una guía de China”.

Los fabricantes chinos están dispuestos a educar y transferir ese conocimiento de sus empresas a otros mercados, profundiza.

“Lo más importante es que el sector privado de Panamá y los países vecinos tome iniciativas previas, en vez de que un gobierno se encargue de crear el comercio y de empezar a hacer negocios con China. Todos debemos estar hablando chino. Señores China ya no es el futuro, es el presente, para qué esperar más”.